Preparación:

Primero tenemos que preparar la fritada con toda la verdura, así que trocearemos en juliana (cortada fina) la cebolla, el calabacín, el pimiento verde y los dos tomates maduros. En una sartén con un buen chorro de aceite de oliva virgen extra se va friendo toda la verdura a fuego no muy fuerte. Cuando lleve unos dos minutos y empiece a sudar (o sea, a ponerse toda transparente y blandita) le ponéis sal al gusto y un poquito de pimienta negra molida. A continuación le añadís media cucharadita de orégano seco y otra media de tomillo seco y lo tenéis todo unos cinco minutos en el fuego. Cuando lo tengáis a vuestro gusto (tened en cuenta que tiene que ir al horno, así que no lo hagáis mucho) lo retiráis del fuego y lo reserváis.
Si os gusta el punto al dente de la verdura, podéis usar la verdura cruda sin más. Queda riquísimo también.

Ahora toca preparar en papillote. En la bandeja del horno tendréis que disponer en toda la base papel de aluminio con bastante “vuelo” para poder cerrar con el que pondremos luego.

Preparad una “camita de verduras” (la fritada o las verduras crudas) y colocáis los 8 trozos de pescado encima y salpimentáis un poco. A continuación le añadís el medio vaso de vino y el zumo de una de las naranjas. Cortáis la otra naranja en rodajas y las colocáis encima. Si os habéis decidido por las verduras crudas, rociad con un poco de aceite de oliva virgen extra, al gusto.
Ahora viene lo más importante del plato.

​Tenéis que cerrarlo lo más herméticamente posible con el papel de aluminio que habéis puesto al principio, formando como sobres cerrados, ya que si no, el efecto papillote no se producirá. Lo metéis al horno a 180º previamente calentado y durante unos 10 minutos. Transcurrido ese tiempo (dependerá del grosor de los trozos de pescado) comprobáis que está a vuestro gusto, siempre procurando que no esté muy hecho porque os quedará seco y voilá!!! ya tenéis preparado el pescado al papillote..